Nowa Huta - enorme complejo industrial y fundición, símbolo de la Polonia industrial y resistencia contra el régimen comunista.
Este proyecto se llevó a cabo, según el plan de la primera ciudad socialista, cuya ejecución requirió una gran cantidad de trabajo. Miles de trabajadores fueron traídos de pequeños pueblos y aldeas en la década de 1950 para su construcción. Para estas personas, la realización de este sueño comunista fue una oportunidad de progreso social. Durante el trabajo de construcción más intensivo, se emplearon 30.000 trabajadores a la vez, en un suburbio que en ese momento tenía 250.000 habitantes. El símbolo socialista (Lenin) decoraba con una imagen gris típica de la arquitectura del socialismo realista. Esta imagen de Lenin ahora ha sido reemplazada por una réplica de las cruces de Danzig. Sin embargo, no fue por casualidad que este ideal socialista, se construyera cerca de Cracovia. Según los planes del poder comunista, los ideales de la clase trabajadora eran eliminar con el tiempo los elementos provinciales, clericales y conservadores que aún estaban presentes en la mente de los habitantes de la antigua capital de Polonia. Pero la historia tomó un rumbo diferente. Los primeros enfrentamientos entre los trabajadores y las autoridades comunistas ocurrieron en la década de 1960, cuando los trabajadores querian permiso para construir una iglesia en Nowa Huta. En la década de 1980, Huta se convirtió en el centro del levantamiento contra el régimen comunista. Al mismo tiempo, la élite intelectual de Cracovia llegó a un acuerdo con los trabajadores de Nowa Huta. Hoy, las dos ciudades llevan vidas completamente separadas. Cracovia continúa desarrollándose inparable, mientras que Huta se ve afectada por el desempleo y la delincuencia. Sin embargo, vale la pena visitar sus acerías, chimeneas y ciudades residenciales, ya que permiten vislumbrar la cultura de la clase trabajadora de la Polonia de posguerra.