San Juan Pablo II (Karol Wojtyła) 1920-2005
Nació en 1920 en Wadowice, un pequeño pueblo cerca de Cracovia. A los 9 años perdió a su madre. En 1932 murió su hermano mayor. En 1938, después de graduarse en la escuela secundaria, se mudó con su padre a Cracovia, donde estudió literatura polaca en la Universidad Jagellónica. Sus mayores pasiones fueron la literatura y el teatro.
Después de la invasión alemana en septiembre de 1939, comenzó la ocupación nazi de Polonia. Cuando la Universidad cerró en el otoño de 1940, para evitar la deportación como trabajador forzoso a Alemania, trabajó en una cantera. En 1941 su padre murió repentinamente. Un año después, siguiendo su vocación, inició sus estudios teológicos en un seminario eclesiástico ilegal organizado por el cardenal Sapieha, arzobispo de Cracovia. El cardenal Sapieha lo ordenó sacerdote el 1 de noviembre de 1946.
Poco después, Karol Wojtyła se fue a Roma, donde estudió y se convirtió en doctor en teología. Regresó a Polonia en 1948 y se comprometió con el trabajo evangélico con los estudiantes. Enseñó ética en la Universidad Jagellónica y en la Universidad Católica de Lublin. Ordenado arzobispo en 1963 y cuatro años más tarde cardenal, trabajó y evangelizó en la Polonia comunista. A la edad de 58 años, el 16 de octubre de 1978, fue elegido Papa, el primer Papa no italiano en 455 años. Llevó el nombre de Juan Pablo II.
Inició un nuevo estilo de ejercicio del oficio papal. Hizo 104 viajes para visitar a devotos de todo el mundo. Este es su mensaje principal: “¡No tengais miedo! Abrid de par en par las puertas a Cristo ”. Alentó y devolvió la dignidad a los pobres y excluidos. Su personalidad, su franqueza y su amor por la gente sencilla atrajeron multitudes. Durante su pontificado escribió 14 encíclicas y canonizó a 582 santos. Fue un hombre de diálogo interreligioso, especialmente con el judaísmo. Fue el primero entre los papas que visitó una sinagoga y oró frente al "Muro Occidental" en Jerusalén. Ha quedado en nuestra memoria como un hombre de gran fe y santidad. Para los polacos se ha convertido en el "padre de la patria" y una gran autoridad. Sin su testimonio y sabiduría, el movimiento de varios millones de polacos - “Solidaridad” que marcó el comienzo del fin del régimen comunista en Polonia, no habría visto la luz del día.
Su compromiso con el inicio de la caída del comunismo es grandioso e inestimable. Después de su muerte, las multitudes que asistieron a su funeral lo proclamaron "Juan Pablo II el Grande" mientras cantaban "Santo Subito". Juan Pablo II fue canonizado el 27 de abril de 2014 por el Papa Francisco, en el Día de la Divina Misericordia.